Romeo debe morir, será como en una siesta de verano, de forma lánguida y silenciosa. su veneno-asepsia no intoxicará mi corazón. el halago no hará que la niñalenteja vuelva al redil de la no-acción. ¿te enteras? tengo artillería pesada, un ancla que sujeta la verdad de mi yo presente, una granada azul llena de emociones gráficas, y en mi armadura un grito que canta mi nana, nana de la niñalenteja, la quieres o la dejas.
me encanta este texto, me ENCANTA!
ResponderEliminara mi si que me encanta esto. es una de las cosas más bonitas que he leído. me encantamencanta!
ResponderEliminarBuenísimo... la consigna está muy clara
ResponderEliminargracias niñas!
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